La batalla que llevan los fabricantes de televisores 3D está siendo bastante vergonzosa. Cada uno «soborna» a una productora para que le otorgue la distribución de una película en exclusiva, y así creen que el consumidor elegirá su producto por encima del de la competencia.
Sinceramente, si me tengo que gastar 2.500 euros en una tele + gafas + reproductor, me fijo en la calidad y en las características del equipo, no en la película que regalan. Es patético ver que, a pesar de que apenas hay una decena de títulos editados en el nuevo formato Blu-ray 3D, es imposible comprarlos en las tiendas. Entonces, ¿para qué queremos que la tele sea 3D? Si luego apenas vamos a poder ver 4 películas mal contadas…
Todo esto viene a raíz de la última noticia aparecida de Thedigitalbits, que confirma que el BD-3D de Avatar será exclusiva de Panasonic, probablemente durante un año…
Ale, a pastar…